Cremas, jabones y geles exfoliantes: el secreto para una piel suave y radiante
¿Tu piel necesita un reset? Los exfoliantes corporales son tu mejor aliado para dejarla lisa, renovada y con un aspecto más luminoso. Con el ritmo del día a día, es normal que la piel acumule células muertas y pierda vitalidad. Una buena exfoliación ayuda a eliminar impurezas, mejorar la textura y preparar tu cuerpo para absorber mejor cremas, aceites o autobronceadores.
Tipos de exfoliantes que puedes encontrar
Exfoliantes físicos: contienen pequeñas partículas (como sal, azúcar o cáscara de nuez) para una exfoliación mecánica.
Exfoliantes químicos: con AHA o BHA, ideales para pieles sensibles o con textura irregular.
Formatos en gel, crema o aceite: para que elijas según tu tipo de piel o preferencias sensoriales.
Cuándo exfoliar y qué exfoliante usar según tu tipo de piel
Exfoliar correctamente es clave para lucir una piel suave, luminosa y libre de impurezas. Pero no todos los tipos de piel necesitan el mismo ritmo ni el mismo tipo de producto. Aquí te lo explicamos:
Piel normal - 1-2 veces por semana
Tipo ideal: Gel exfoliante o exfoliantes físicos suaves (con partículas naturales) o químicos con AHA suaves, perfectos para mantener el equilibrio sin irritar.
Piel grasa o con tendencia al acné - 2-3 veces por semana
Tipo ideal: Exfoliantes químicos con ácido salicílico (BHA) o glicólico (AHA), que limpian en profundidad sin necesidad de fricción y ayudan a controlar el exceso de sebo y evitar granitos.
Piel seca o deshidratada - 1 vez por semana (máximo)
Tipo ideal: Exfoliantes enzimáticos o con ácido láctico (AHA), que actúan de forma más delicada. Evita los scrubs con gránulos para no irritar ni resecar más.
Piel sensible o reactiva - Cada 10-15 días
Tipo ideal: Cremas exfoliantes muy suaves, preferiblemente sin gránulos. Las fórmulas con enzimas de frutas o PH equilibrado son las más respetuosas. Siempre haz una prueba en una pequeña zona antes de usarlo en todo el cuerpo.
Piel mixta - 1-2 veces por semana
Tipo ideal: Puedes combinar exfoliantes: químicos suaves para las zonas grasas (como la espalda) y fórmulas cremosas en zonas secas o sensibles. Escucha a tu piel y adapta la frecuencia si notas irritación.