La mascarilla facial blanca con alfa-arbutina de DHC restaura sin esfuerzo un cutis radiante y de aspecto saludable. Con un diseño único con solapas abatibles que te permitirán cubrir todo el rostro y el contorno de los ojos, la mascarilla aúna alfa-arbutina avanzada, morera, serina y peonía para iluminar y revitalizar la tez apagada.

Impregnada de una dosis de hialuronato sódico que penetra en las capas más profundas de la piel para atraer el agua, la mascarilla repone la humedad y proporciona una hidratación de larga duración, al mismo tiempo que combate la decoloración causada por la exposición al sol y el envejecimiento. La piel queda suave, tersa y flexible con un brillo juvenil.