Extraordinarios

De entrada diré que descubrí éste producto gracias a un vídeo de Patry Jordan y aunque admiro y aprecio los consejos de esta chica cuando presentó éstos polvos compactos translucidos lo primero que pensé fue "es un perfeccionador, de acuerdo, pero tengo 26 años; no lo necesito". Y sin embargo me picaba mucho la curiosidad. Tanto que un día me lancé pensando que si no lo probaba nunca lo sabría. Y me he enamorado, literalmente. Deja la piel suave y lisa como la seda, mejora su apariencia y sin aportar luminosidad o glow ni de lejos deja sensación mate. Es un producto perfecto cumpliendo lo prometido y además con el plus de estar muy bien ideado ya que contiene una tapa de plástico con pequeñísimos agujeros para impedir que el producto "escape" o se pierda sin contar que es una excelente medida higiénica. El polvo es tan fino que basta una pequeña pasada con la brocha para que ésta quede impregnada de pequeñas partículas blancas como la nieve. Y luego aplicarlos sobre el rostro es tan fácil y divertido que hasta una niña podría hacerlo. No tengo nada y digo nada que reprocharle. Incluso su precio me parece justo como el que más. Y no estoy en absoluto de acuerdo con el el packaging sea desmerecedor del producto ya que es exactamente como debe ser: un buen protector del tesoro que hay dentro. En fin, para ver un envoltorio bonito basta con comprarse un Ferrero Rocher 😁 Lo que cuenta, al menos para mi es el valor del producto, el contenido, y en éste caso es extraordinario. En serio.